¿CÓMO FORMULAR OBJETIVOS EN UNA INVESTIGACIÓN DE TESIS?
En una investigación científica, sabemos que los
objetivos son parte esencial del problema. Por consiguiente, mientras no esté
bien definido el problema no será factible de plantearlos de forma
correcta.
Aquí consideramos algunos criterios:
· Deben estar dirigidos a los elementos básicos del problema.
· Deben ser claros y precisos.
· Deben ser medibles y observables.
· Deben ser expresados en verbo en infinitivo.
· Deben seguir un orden metodológico.
· El alcance de los objetivos debe estar dentro de las posibilidades del investigador.
· Su formulación debe involucrar resultados concretos.
· Señalar qué es lo que se debe investigar.
· Ayudar a seleccionar recursos o técnicas por utilizar.
· Señalar las metas por alcanzar.
En
virtud de las razones expuestas anteriormente afirmamos que los objetivos, por
su parte, constituyen una construcción del investigador para abordar un tema o
problema de la realidad desde el marco teórico escogido. En la práctica, los
investigadores suelen diferenciar entre objetivo general y objetivos
específicos. Los primeros en mención son considerados el “foco” del estudio[1],
del que se desprenden los objetivos específicos o preguntas de investigación.
King, Keohane y Verba (1994) plantean dos criterios para elaborar los
objetivos: en primera cuestión, estos deben representar interrogantes
significativos para comprender el mundo real, lo cual permitirá conocer más
acerca de uno o diversos aspectos de la realidad; en segunda cuestión, que
impliquen una contribución al conocimiento acumulado en un área, vale decir un
aporte a la teoría, a partir de una postulación de nuevas explicaciones
causales, de inferencias descriptivas de nuevos conceptos, redefinición de
procesos, etcétera.
A
estos dos criterios deberíamos agregarle un tercero: los objetivos de estudio
deben ser susceptibles de ser contestados. Esto no significa que conozcamos la
respuesta de antemano, sino que en el estado actual del conocimiento sea
posible obtener al menos tentativamente. Las interrogantes para las cuales ya
conocemos las respuestas de antemano no son objetivos de estudio; son
enunciados prescriptivos o expresan opiniones ya formadas -que pueden o no ser
muy ilustrativas e interesantes-.
En
consecuencia, señalamos que los objetivos son formulados como proposiciones que
contienen conceptos teóricos fundamentales, en las que el investigador postula
una intención, por lo general explicitada por medio de un verbo en infinitivo
de abordar un sector de la realidad en un espacio y tiempo determinado. El
recorte temporal-espacial es una condición necesaria para encarar cualquier
tipo de investigación; por lo que no se puede estudiar el mundo a lo largo de
toda su historia.
[1] Robson, C. (1994) Bienes de Investigación Mundial.
Un recurso para los científicos sociales e investigadores practicantes (Oxford:
Blackwell Publishers). P. 28. Los objetivos se hace referencia a las
unidades de análisis o los casos y el espacio - ámbito en el que se realizará
el estudio. Las unidades o casos conforman el universo de estudio; las primeras
se utilizan en investigaciones cuantitativas, y los segundos en estudios
cualitativos.