SELECCIÓN DEL DISEÑO DE INVESTIGACIÓN DE TESIS
La adecuada selección de diseño constituye un punto primordial de toda investigación, para ello el investigador debe tomar en cuenta varios factores que exponemos a continuación:
1.
Poner
a prueba las hipótesis
El
investigador para poner a prueba o validar las hipótesis debe preguntarse
respecto de la idoneidad de los diferentes tipos de diseño y de si estos son
válidos para responder a las preguntas de investigación. Habitualmente una
debilidad de los diseños que se proponen a veces es la falta de congruencia
entre hipótesis y el diseño. Por ejemplo querer probar una hipótesis que
requiere tres o más grupos usando un diseño de dos grupos o pretender probar
una hipótesis de interacción con un diseño de dos grupos.
Otro
error frecuente que refleja falta de coherencia entre el problema y la
hipótesis de investigación frente al diseño de estudio, es emparejar sujetos
por variables irrelevantes a los fines de la investigación y querer utilizar un
diseño de dos grupos relacionados, experimental-control, que presupone la
igualdad inicial de estos.
2.
Control
de variables independientes
Esto se refiere al control tanto de las variables experimentales que se manipulan o miden como al de las variables extrañas. En cada estudio existen determinadas variables extrañas que pueden influir en los cambios observados en la variable dependiente y que sólo en la medida en que son controladas, dejan de ser explicaciones meritorias de los resultados y permite que estos sean explicados por las variables independientes experimentales. Otra forma de ejercer el control es manipulando o midiendo el investigador las variables experimentales, pues es precisamente esta acción sobre ellas lo que diferencia al experimento de otros tipos de investigación.
Consecuentemente la técnica más eficaz de control de variables extrañas es la distribución al azar. Por ello es que se supone que si los grupos se han elegido así, deben ser estadísticamente iguales antes de introducir la o las variables independientes. Por ello, se recomienda usar la asignación al azar siempre que sea posible y aplicarla no solo a la selección de las muestras sino al asignar estas a grupos, tratamientos, investigadores, etcétera. En los diseños pre experimentales, es frecuente creer que se ha probada la hipótesis y así se concluye en el informe. Estas conclusiones son engañosas pues la falta de control de las variables extrañas impide saber si la variable independiente es la causa del cambio observado.
3.
Generalización
Este criterio es sinónimo de validez externa, como vemos más adelante. Es la que responde al interrogante, ¿en qué medida se puede generalizar los resultados de un estudio a otros sujetos, grupos y condiciones experimentales?
Este criterio es de gran interés en la investigación aplicada, pues se persigue generalizar los resultados a poblaciones lo más extensas posible. Empalma con el problema de la representatividad de la muestra, pero los conceptos de población y muestra se aplican no solo a las personas, sino también a las situaciones experimentales, por ejemplo. Con propiedad los resultados sólo pueden generalizarse a aquellas muestras, personas grupos o situaciones que sean muy similares a las empleadas en la investigación y ello siempre que se hayan ejercido los controles adecuados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario